En esta serie hay, por un lado, una preocupación por el tiempo, que se hace presente en la reiteración de la escritura fotográfica grabada en el sensor por la doble exposición y, por el otro, una apuesta deliberada en contra de la nitidez, buscada en los desplazamientos que ejecuto en el transcurso de la toma. Esta doble exposición deja un velo en la superficie que en parte, oculta, disimula o desorienta al que mira y es justamente esa interferencia lo que me interesa.
La operatoria es la misma; me acerco, desenfoco el fondo, la oscuridad que insiste…
Aunque siempre, en un reflejo de luz, en un detalle, en una partícula micro, habrá un resto (de mundo) que se salve de la confusión.
