Las pinturas de Gracia Barrios son de fines de los años 50, y en ellas reconocemos la depuración del mundo visible, y abstraídas hasta la disolución de las mismas, por ejemplo, en Familia en el campo de 1958 y en Figuras de espalda de 1959, el solo título es un indicio para buscar las figuras, o simplemente, para entregarse a las formas y colores pastel que reclaman su propio dominio expresivo, que es en buenas cuentas el anhelo moderno por la pureza y autonomía del lenguaje plástico.
Las pinturas de Gracia Barrios son de fines de los años 50, y en ellas reconocemos la depuración del mundo visible, y abstraídas hasta la disolución de las mismas, por ejemplo, en Familia en el campo de 1958 y en Figuras de espalda de 1959, el solo título es un indicio para buscar las figuras, o simplemente, para entregarse a las formas y colores pastel que reclaman su propio dominio expresivo, que es en buenas cuentas el anhelo moderno por la pureza y autonomía del lenguaje plástico.