Artista de formación autodidacta, conocedor del oficio, atento escucha de los caprichos de la materia, forjador de formas orgánicas, obsesivo buscador de la perfección, minucioso constructor de irrealidades. Todas estas afirmaciones podrían describir de manera más o menos precisa al escultor del que nos vamos a referir.
David Guzmán sostiene haber albergado una profunda curiosidad por la manera en que la materia, ya fuese piedra, metal u otros materiales adoptan ciertas formas, se transforman.
El acero inoxidable material con el que hasta la fecha mantiene un amorío, con el cual ha logrado formar un vínculo indisoluble en el que la materia da rienda suelta a sus posibilidades y el escultor expresa su mundo interior. Esta etapa de su escultura es más cercana a la vertiente de Julio González, Pablo Gargallo, Eduardo Chillida, Pedro Cervantes y cómo estos, él defiende el oficio a ultranza. Reconoce una diferencia fundamental entre el escultor y el diseñador de escultura, el pertenece a la primera categoría y se siente afortunado de ser testigo y partícipe de la MAGIA DE LA TRANSFORMACIÓN.
Algo que sí tiene muy bien identificado es que su quehacer escultórico proviene de la NECESIDAD y de la NECEDAD, de esa insaciabilidad por lo nuevo, es por esto que deja que el material se suba a los muros, que penda de delgados cables, que se abrace de manera sorpresiva a elementos pétreos, que tome caprichosas formas que parecen contrarias a su naturaleza. Sus esculturas proyectan una vitalidad resultado de la minuciosidad en su manufactura.
Sostiene también que, en contraposición a la naturaleza de sus esculturas, matéricas, contundentes, pesadas, el elemento primordial en ellas es el vacío y no la materia.
Esculturas que parecen ser la instantánea de un movimiento perpetuo, tramos de acero que parecen ondular, por estas y otras cualidades y calidades de su obra es que ÉL se autodefine como ESCULTOR DEL AIRE.
A lo largo de su carrera ha tenido exposiciones nacionales e internacionales, entre los acontecimientos más destacados fue su participación en Latin American Art Sotheby’s New York del 2012 al 2016 y la mención en el artÍculo de "5 Latin American Artists You Need to Know (And Buy)" publicado por Artnet.