Obra bidimensional de formato rectangular y disposición vertical en la que se representa una joven de espaldas. La figura de la joven ocupa todo el centro del cuadro y parece surgir desde una especia de río. Su vestido se funde con el agua y con la vegetación de los lados. Destaca el uso de colores grises y beiges muy poco saturados.
La pintura tiene dos tipos de técnicas principales. Por un lado el fondo de la composición presenta la pintura aplicada con transparencias y fundidos. Por otro lado la figura y la forma que la envuelve está resuelta con pinceladas cortas y opacas dadas a modo de puntillismo. De este modo queda una textura de puntos yuxtapuestos con cierto orden. En ambos casos hay pinceladas están ligeramente esfumadas dadas en varias direcciones.