Obra bidimensional de formato rectangular y disposición horizontal en la que se representa un retrato en primer plano de una mujer. La composición se construye con grades trazos mientras que los ojos y el pelo parecen casi rayados. Predomina el uso de una paleta cálida.
En la obra se distinguen dos formas de aplicación de la pintura. Por un lado los tonos pasteles están realizados con trazos velados, aplicados con la pintura muy diluida. Estos trazos son: esfumado, en sentido diagonal, semitransparentes y han sido dados con un pincel plano. Por otro lado el tono negro se ha realizado con la pintura espatulada y manchas opacas, que finalmente han sido esgrafiadas.