Locolektivo brota como una semilla ancestral, trayendo de regreso la esencia de la colectividad y la comunalidad. En el corazón de este movimiento, la obra de la artista Yuma Díaz florece, y para que su arte resuene en su verdadera profundidad, es fundamental que hable el lenguaje de la tierra: el zapoteco.
Permíteme tejer el mensaje que me compartiste, impregnándolo con el espíritu de la comunalidad y el legado del "flor y canto" de Moctezuma, uniendo la dualidad del arte y la lengua para crear una narrativa que honra nuestras raíces:
"Xquidxhi xtenë xhilò" (Imagen que nace de la tinta esparcida)
Así como de la tierra fértil brotan las flores más bellas y los cantos más profundos, la obra de Yuma Díaz surge de la tinta esparcida, revelando "imágenes que nacen de la tinta". Cada Giclée, esta reproducción de arte de alta calidad, impresa con tintas duraderas y gran precisión, es un eco de la memoria colectiva. No es solo una copia, sino una nueva expresión que lleva en sí la fuerza de nuestra comunidad, un fragmento del universo que Yuma plasma con sus manos y espíritu.
En cada trazo, en cada color, se manifiesta el "flor y canto" de nuestro tiempo, una invitación a la reflexión y al diálogo. Es la comunalidad misma la que se imprime, la que se esparce, recordándonos que la belleza verdadera reside en la conexión, en el compartir, en el latir de un pueblo que se reconoce en el arte.
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