Mural escultórico de grandes dimensiones en el que se representan diferentes elementos cuya iconografía tiene relación con la farmacia. De izquierda a derecha encontramos unas formas orgánicas que tienden a la abstracción, una serpiente, una figura arbórea (seca), una formas que recuerdan a vertebras que se ordenan en una línea diagonal y finalmente unos elementos curvos y sinuosos y dos círculos. En el mural destaca el uso de colores tierras, neutros y con algunos metalizados.
La obra en gres cerámico, está realizada mediante diferentes placas, para poder cocerlas individualmente, las cuales se han unido posteriormente. El fondo de la obra, mediante placas, presenta un acabado de bizcochado, sin esmalte. Sobre esto, se realizaron relieves y decoraciones a lo largo de la obra; en primer lugar un relieve redondeado y esmaltado en tonalidades marrones y verdes; en segundo lugar una circunferencia esmaltada en azul, donde se entrelaza la figura de una serpiente con incisiones para representar las escamas, las cuales están tintadas en negro; la siguiente figura, aparenta la representación de un árbol mediante churros de gres entrelazados en color verdoso; de forma diagonal, una hilera de diferentes piezas en blanco, donde se han dibujado mediante un pincel fino y en tonalidades marrones, distintas figuras relacionadas con la ciencia; el siguiente relieve, en tonalidades azules, tiene una forma ondulante de forma vertical, donde se diferencias tres texturas: incisiones, pellizcos y liso; por último, en la esquina superior derecha, dos formas circulares esmaltadas en azul y blanco, sobre la blanca se han escrito en color rojo diferentes fórmulas químicas.
