Carlos Villabón parte de la observación y el estudio cuidadoso de una bolsa plástica llena de agua, que en el trópico es usada como repelente para los insectos cuando se acercan a ella. Este objeto es el protagonista en su obra ya que estuvo presente durante toda su infancia y es por esto que en sus lienzos se ve transformada o adaptada donde interactúa directamente con objetos del entorno cotidiano. En su proceso creativo, Villabón recrea y transforma la bolsa de distintas maneras, cambiando su volumen, su contenido, convirtiéndo en nuevas figuras, las cuales vuelve y transmuta.